Las carreteras pavimentadas con asfalto negro tienden a absorber gran cantidad de calor solar, lo que las vuelve extremadamente calientes para peatones y conductores, especialmente en climas cálidos. Para mitigar este problema, se ha empezado a aplicar pintura azul en algunas áreas. Esta pintura tiene la capacidad de reflejar la luz solar, lo que ayuda a mantener las carreteras más frescas y cómodas. 
La introducción de las carreteras azules comenzó en una zona muy transitada de Doha, la capital de Qatar, cerca del Zoco Waqif. Aquí, la ingeniería civil ha desempeñado un papel fundamental en la mejora del confort térmico de las infraestructuras urbanas. Este enfoque no solo ofrece beneficios prácticos inmediatos, sino que también demuestra cómo la innovación en ingeniería puede enfrentar desafíos ambientales y mejorar la calidad de vida en las ciudades.
